Julieta es una creativa compositora argentina que tuve el agrado de conocer por redes sociales, hace ya un buen tiempo. Decidí acercarme a ella y profundizar un poco mejor en su propuesta musical, dándome cuenta de que la afectividad, el tacto y la belleza, eran parte de su lenguaje creativo, cosa que me hizo pensar en crear una colaboración artística junto a Julieta.
Mi intuición no se equivocó; le encargué una obra para dúo de violín y viola, y llegó a mis manos una composición sencilla, pero sublime, de un lenguaje conmovedor y personal.
La carrera de Julieta se caracteriza por una profunda sensibilidad y una búsqueda constante de nuevas formas expresivas, lo que la ha llevado a colaborar con diversos ensambles e intérpretes y me parece un total acierto compartirles un poco de esta compositora. En nuestra conversación, Julieta nos comparte sus experiencias, inspiraciones y desafíos en su proceso creativo.
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Karol: – ¿Qué te inspiró a dedicarte a la composición musical?
Julieta: La necesidad de crear. De inventar mis músicas. Lo hacía en casa. A modo de juego. Cantando y en el piano. En la mayoría de las escuelas la música se enseña imitando lo que hacen tus maestras/os. Lo cual es lógico, pero en mi caso me faltó el momento creativo. Eso fue lo principal. También de adolescente empezaba a escuchar diversas voces (bastante nefastas por cierto) que decían que la carrera de composición era difícil… que pocos se recibían, mucho menos mujeres… así que ahí fui.
Karol: Conociendo un poco de tu historia, me doy cuenta de que la música te acompaña desde muy pequeña. ¿Qué beneficios crees que tuviste al estar tan cerca de la música desde tan corta edad?
Julieta: El inmenso beneficio de tener desde siempre a disposición un mundo hermoso para habitar. El de los sonidos, el de la creatividad, el de la música. Ahí… en ese mundo ajeno a todo lo horrible, soy quien soy, me quiero mucho, me expreso libremente y sin dudas sale lo mejor de mí para dar.
Karol: ¿Qué músicos/as o compositores/as han influido en tu carrera?
Julieta: Un super mix che… en mi casa se escuchaban folklores diversos: Mercedes Sosa, Raúl Carnota, Suna Rocha, Baglietto, Vitale, Spinetta, Chango Farías Gómez, Silvio Rodríguez, Pablo Milanés, Caetano Veloso, Chico Buarque, Simone, The Beatles, Queen… y muchos/as más. María Elena Walsh, Pro música de Rosario y Ruidos y ruiditos eran las músicas mías. Pero cuando somos niñas/os, lógicamente consumimos las músicas que oyen los adultos que nos rodean. Después en la escuela conocí el mundo de la música académica. Y amé. Profundicé ese mundillo en la universidad. Lieder, óperas, sinfonías, conciertos. Me conmovieron Monteverdi, Mahler, Bartok, Stravinsky.
Y luego el camino personal… que me fue llevando a amar la música para cine y a intentar componer para cine. Ese mundo es maravilloso.
Como verás me cuesta mucho nombrar a alguien. Creo que mis influencias son la mezcla de los folklores, la música académica y las búsquedas actuales de nuevas sonoridades.
Karol: ¿Cómo describirías tu proceso de composición? ¿Tienes algún ritual o método particular al que recurres?
Julieta: Escritorio ordenado, sahumerio y mate. Cuaderno, compu, auriculares y piano. En cuanto a método… depende. A veces ya tengo la sonoridad armada mentalmente y sólo debo escribirla. Otras empiezo en el cuaderno con algún plan de trabajo: orgánico, palabras o imágen inspiradora. Por lo general (salvo que sea un encargo y me hayan solicitado algo específico) busco algo que desee plasmar en la música que estoy por hacer: una palabra, una frase, una imagen. Por eso creo que me gusta tanto componer para cine… porque la música acompaña la trama. Y me parece hermoso buscar eso e intentar lograr el mejor empaste entre imagen y música.
Karol: -¿Prefieres escribir para alguna formación en particular: orquesta, música de cámara, solista, etc?
Julieta: No. Me encanta escribir músicas. Fin (risas). Me gusta ir variando pero me gusta todo. También escribo lo que me van encargando y a veces busco músicas que no haya hecho y me encamino en ese instrumento u orgánico. Es un lindo desafío. Actualmente por ejemplo, me estoy adentrando (estudiando, escuchando, consultando) en la Trompa y por escribir melodías diversas para profes y estudiantes.
Karol: ¿Cómo ves el panorama musical docto en Argentina actualmente? ¿Qué cambios has notado los últimos años?
Julieta: Compleja esta pregunta… mirá. Te puedo decir dos cosas: 1-de a poquito las mujeres vamos formando más parte de la escena… pero a mi juicio falta mucho camino por recorrer. Es decir: ¿hay más directoras de orquesta en escena? Si… pero casi nulas en puestos altos u oficiales. ¿Hay músicas de compositoras en escena? Si… pero por lo general en marzo. Acorde al día internacional de la mujer trabajadora. ¿Se entiende? Pareciera que somos la efeméride. Pero como dicen algunas colegas mayores que yo: “antes ni en marzo”.
2- Por otro lado noto que se hacen mucho los repertorios “de siempre”… lo cual están maravillosos pero sobran compositoras/es vivos/as y sigue en nuestro país muy despareja esa balanza.
Karol: – ¿Qué desafíos has enfrentado como mujer en el campo de la composición?
Julieta: Te diría que muchos pero de los que soy consciente recién ahora. Por ejemplo en mi cursado de la Universidad, frases terribles como: “este trabajo está muy bien hecho para ser mujer”… y de ahí en adelante. En el momento si bien me hacían sentir rara, distinta, incómoda… no me lograron desanimar. Al contrario. Eran impulso para seguir adelante. Pese a las risas de mis compañeros en esos momentos. Creo que era bastante inocente y tenía muy claro que yo lograría recibirme y haría todo para eso. Y así fue.
Luego ya de adulta sólo puedo decir (y lo he notado pensando en esta respuesta) que el 95% de las propuestas artísticas, proyectos, entrevistas, convocatorias y encargos que he tenido han sido generados por otras mujeres: directoras, instrumentistas, periodistas, comunicadoras, etc.
Karol: – Desde hace un tiempo, estás colaborando junto al ensamble chileno llamado “Dúo Gestos” para los cuales escribiste un afectivo y lindo dueto ¿Cómo te sientes al saber que esa obra pertenecerá al primer disco debut de esta agrupación? ¿Cómo ha sido la colaboración musical con este dueto?
Julieta: Es una gran alegría y un honor inmenso. ¡Semejantes intérpretes abordando una pieza de mi autoría! y que viaje a Chile mi música… ¡primera vez en mi carrera! Estoy más que agradecida.
Conocí al dúo por redes sociales, y comenzamos un diálogo musical y humano super amable que concluyó con la composición, ensayos y preparación de mi obra para el disco. ¡Un lujo realmente! Y porque no todo son sonidos en esta vida, destaco que con el dúo ha sido desde el inicio un hermoso intercambio humano. Item super importante para mí a la hora de trabajar juntxs. Así que de maravilla este proyecto. Repito… estoy super agradecida.
Karol: – Al escuchar tu canal de youtube, me doy cuenta de la emotiva forma compositiva que rodea a tus obras. ¿Qué mensaje buscas transmitir a través de tu música?
Julieta: Waw. Muchísimas gracias. Creo que cada obra tiene su mensaje. Algunas vienen de mucho amor, otras de un gran desamor… de tristezas ondas… de alegrías, otras intentan hacer llegar mensajes que me parecen importantes como “Tierra” acerca del daño que le hacemos al planeta. Pero creo que lo más importante es llegar. Transmitir. Cada persona que escuche tendrá su interpretación subjetiva. Pero que llegue. Que produzca algo. Incluso disgusto por supuesto. Que siempre es una opción.
Karol: ¿Qué consejo le darías a las nuevas generaciones de compositoras y que están comenzando en este camino?
Julieta: Que sigan, que transiten, caminen, hagan. Lo que vayan sintiendo, pudiendo, queriendo, deseando. Y que escuchen más a su corazón y a su intuición que a cualquier otra voz.
Karol: – Nombra al menos 3 obras de compositoras argentinas que la audiencia deba escuchar.
Julieta: Les voy a recomendar las músicas de colegas con diverso lenguaje y estilos que conocí a través del Foro Argentino de Compositoras (pueden buscar las redes del Foro para conocer más): Gabi Yaya, Gabriela Battistini y Barby López, Vale Romero y Vivi Dal Santo. ¡Muchas gracias Karol y Revista Cuerpo y territorio por este valioso espacio!